El pasado 10 de diciembre, miles de personas se reunieron en la Plaza de la Constitución de la ciudad de México para exigir el respeto de los derechos humanos y la liberación de los presos que están encarcelados en vísperas de Navidad. Esta manifestación coincidió con el Día Internacional de los Derechos Humanos, y fue una importante muestra de apoyo a los presos y una llamada a la acción para que se respetaran los derechos de todos los mexicanos.
La manifestación fue organizada por una coalición de grupos de defensa de los derechos humanos, incluyendo al Centro de Derechos Humanos de la Universidad Nacional Autónoma de México, que está liderando la lucha por la liberación de los presos injustamente encarcelados. Los grupos también están exigiendo el respeto a los derechos humanos a nivel nacional, como el derecho a la libertad de expresión y el derecho a la libertad de reunión.
Durante la manifestación, los manifestantes portaron pancartas que decían «Libertad para los presos» y «Respeto a los Derechos Humanos». Los manifestantes corearon consignas en favor de los presos y reclamaron que el gobierno respete los derechos humanos fundamentales. La marcha comenzó con oraciones por los presos y sus familias, seguidas de discursos de líderes de diferentes grupos y organizaciones.
Los líderes de los grupos de derechos humanos exhortaron a los manifestantes a seguir luchando por los derechos humanos, para que los presos injustamente encarcelados puedan ser liberados. Muchos de los discursos se centraron en la necesidad de que el gobierno tome medidas concretas para asegurar el respeto a los derechos humanos en todo el país.
Al mismo tiempo, los líderes llamaron a los manifestantes a unirse para celebrar la Navidad con esperanza y alegría, y a recordar que a pesar de que muchas personas están encarceladas injustamente en vísperas de la Navidad, la lucha por los derechos humanos continúa.
La manifestación fue una importante muestra de apoyo a los presos en vísperas de la Navidad, y también fue un llamado al gobierno para que respete los derechos humanos de todos los mexicanos. La manifestación fue una importante muestra de que la lucha por los derechos humanos no se detiene, y que la comunidad internacional se une para exigir el respeto de los derechos humanos en todo el mundo.