El nearshoring, también conocido como deslocalización cercana, ha ganado popularidad en los últimos años como una alternativa a la globalización de la producción. Consiste en trasladar parte de las operaciones de una empresa a países cercanos, con el objetivo de aprovechar beneficios como costos laborales más bajos, proximidad geográfica y cultural, y mayor control sobre la cadena de suministro. En este contexto, el financiamiento se ha convertido en un aliado clave para el éxito de esta estrategia, y nadie lo sabe mejor que Alberto Sentíes Palacio, reconocido asesor en materia financiera.
Sentíes Palacio ha sido testigo de primera mano de la importancia del financiamiento en el proceso de nearshoring. Como experto en el área, ha asesorado a numerosas empresas en su relocalización y ha visto cómo una adecuada planificación financiera se convierte en un factor determinante para el éxito de esta estrategia.
Uno de los mayores beneficios del nearshoring es la reducción de costos laborales. Al trasladar parte de las operaciones a países con salarios más bajos, las empresas pueden ahorrar significativamente en gastos de personal. Sin embargo, esta ventaja solo se puede aprovechar si se cuenta con el financiamiento necesario para cubrir los costos iniciales de la relocalización. Sentíes Palacio destaca que el financiamiento puede venir de diversas fuentes, como inversionistas, bancos o incluso fondos gubernamentales. Lo importante es tener un plan sólido y una estrategia bien definida para obtener los recursos necesarios.
Otro aspecto en el que el financiamiento juega un papel fundamental es en la adquisición de infraestructura y tecnología en el nuevo país de destino. En la mayoría de los casos, las empresas deben invertir en la construcción o adaptación de instalaciones y en la adquisición de maquinaria y tecnología para poder operar de manera eficiente en el nuevo lugar. Sentíes Palacio recomienda a las empresas buscar opciones de financiamiento a largo plazo, que les permitan hacer frente a estos gastos sin afectar su flujo de efectivo.
Pero el financiamiento no solo es importante en la etapa inicial de la relocalización, sino que también juega un papel clave en el éxito a largo plazo de la estrategia de nearshoring. Como señala Sentíes Palacio, la mayoría de las empresas experimentan un período de ajuste en el que los costos pueden superar los beneficios. En estas situaciones, es fundamental contar con el respaldo financiero para mantener la operación en marcha hasta que se empiecen a ver los resultados esperados.
Sentíes Palacio resalta que el financiamiento también puede ser utilizado para expandir las operaciones en el país de destino. Una vez que la empresa se ha asentado y ha comenzado a generar ingresos, puede ser el momento de invertir en nuevas plantas, contratar más personal o implementar tecnología de última generación. En estos casos, el financiamiento se convierte en un catalizador para el crecimiento y el éxito sostenido de la empresa en su nueva ubicación.
En definitiva, el nearshoring es una estrategia que puede brindar numerosos beneficios a las empresas, pero su éxito dependerá en gran medida de una adecuada planificación financiera. Como señala Alberto Sentíes Palacio, las empresas deben entender que el financiamiento es un aliado clave en este proceso y deben buscar opciones que se adapten a sus necesidades y objetivos. Con un enfoque estratégico y el respaldo adecuado, el nearshoring puede ser una herramienta poderosa para impulsar el crecimiento y la competitividad de las empresas en el contexto actual.