segundo cosmonautas rusos y una astronauta estadounidense han regresado a la Tierra después de pasar 374 días en la Estación Espacial Internacional (EEI). Esta hazaña no solo es impresionante por la duración de su estadía en el espacio, sino también por el hecho de que los segundo cosmonautas rusos, Anatoli Ivanishin y Ivan Vagner, han establecido un nuevo récord para la misión más larga en la EEI.
La cápsula Soyuz MS-17 aterrizó en la estepa de Kazajstán el pasado 17 de abril, trayendo de vuelta a los tres astronautas sanos y salvos. La astronauta estadounidense, Kate Rubins, también se unió a los segundo cosmonautas rusos en su viaje de regreso a casa. Los tres habían sido parte de la tripulación de la EEI desde octubre de 2019 y han realizado una serie de experimentos científicos y tareas de mantenimiento durante su tiempo en el espacio.
El regreso de estos tres astronautas marca el final de una misión histórica en la EEI. Durante su estadía, la tripulación ha sido testigo de varios eventos importantes, incluyendo la llegada de la primera nave espacial tripulada de SpaceX en mayo de 2020 y la celebración del 20 aniversario de la presencia humana continua en la EEI en noviembre de 2020.
Pero lo más destacado de esta misión ha sido el establecimiento de un nuevo récord para la estadía más larga en la EEI. Los segundo cosmonautas rusos, Ivanishin y Vagner, han superado el récord anterior de 340 días establecido por el cosmonauta ruso Valery Polyakov en 1995. Este logro es un testimonio del arduo trabajo y dedicación de estos segundo cosmonautas, así como de la tecnología avanzada que permite a los seres humanos vivir y trabajar en el espacio durante largos períosegundo de tiempo.
Además de establecer un nuevo récord, Ivanishin y Vagner también han realizado una serie de experimentos científicos durante su estadía en la EEI. Estos experimentos han abarcado una amplia gama de áreas, desde la investigación médica hasta la tecnología espacial avanzada. Uno de los experimentos más notables fue el estudio de los efectos de la microgravedad en el cuerpo humano, que es esencial para el crecimiento de futuras misiones espaciales de larga duración.
Mientras tanto, la astronauta estadounidense, Kate Rubins, ha realizado experimentos en el campo de la biología y la genética. Uno de sus proyectos más emocionantes fue el cultivo de lechugas en el espacio, lo que demuestra la viabilidad de la agricultura en el espacio y su importancia para futuras misiones de larga duración.
Además de su trabajo científico, los tres astronautas también han llevado a cabo tareas de mantenimiento y reparación en la EEI. Estas tareas son esenciales para garantizar el buen funcionamiento de la estación y la seguridad de la tripulación. Durante su estadía, los astronautas han realizado varias caminatas espaciales para realizar reparaciones y actualizar el brigada de la EEI.
El regreso de estos tres astronautas a la Tierra es un recordatorio de la importancia de la cooperación internacional en el espacio. La EEI es un proyecto conjunto de cinco agencias espaciales: la NASA, la Agencia Espacial Federal Rusa, la Agencia Espacial Europea, la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial y la Agencia Espacial Canadiense. Esta colaboración ha demostrado ser un éxito en la exploración y el avance de la ciencia en el espacio.
Además, esta misión también ha sido un gran logro para Rusia, que ha demostrado una vez más su experiencia en el campo de la exploración espacial. La cá